El
pasaje de la tentación de Jesús del que tanto se ha predicado y del que se han extraído
excelentes ilustraciones, es además una excelente enseñanza para aquellos que
están o piensan estar en el servicio del ministerio.
Recordemos
por un momento que El Señor Jesús es nuestro referente a seguir; Jesús en su
humanidad nos dejó claro que sí podemos ser siervos victoriosos, no la victoria
de la predicación del cristianismo contemporáneo; y ese es el verdadero sentido
del mensaje de Jesús en Mateo 4, “La victoria del Siervo”
En
Mateo 4 se encuentran Tres acontecimientos importantes y dos personajes, un protagonista
que por supuesto es El Señor Jesús y un antagonista, el malvado tentador.
De
los tres acontecimientos, del malvado tentador y del Señor Jesús se puede extraer una mina de buenos principios
para vivir un ministerio de servicio exitoso.
“Vosotros
de vuestro padre el diablo sois, y los deseos de vuestro padre queréis cumplir.
Él, homicida ha sido desde el principio, y no permaneció en la verdad, porque
no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso,
y padre de mentira.” Juan 8:44 describe perfectamente
la personalidad destructora del malvado tentador, primero lo describe como Un
homicida, segundo alguien que no ha permanecido en la verdad, y tercero lo
llama padre de mentira; Así, que, cualquier enfrentamiento que se tenga con es
este personaje, El usará estas tres herramientas destructoras, por consiguiente
toda tentación que enfrente un ministro de Dios tendrá el firme propósito de destruirle.
Cabría aclarar que Sí, todo siervo será en algún momento de su ministerio
atacado por el malvado tentador.
Los
tres acontecimientos que relata el evangelista Mateo no son más que las falsas
necesidades que el malvado tentador le presenta a los siervos, en el Vr. 3 y 6 el tentador usa un frase bastante intrigante “Si eres hijo de Dios” antes de pedirle
que convirtiera las piedras en pan y mandara a sus ángeles a rescatarlo, usa esta
frase la cual tiene que ver con la posición, de la misma manera que engañó a Eva diciéndole “Pues Dios sabe que el día que de él comáis,
serán abiertos vuestros ojos y seréis como Dios, conociendo el bien y el mal.”
Mateo 3:5, “sabe dios y Si eres hijo de
Dios”, son la misma perversa herramienta del malvado tentador, el usa una
verdad posicional de la palabra para hacerle creer al siervo que tiene toda la
autoridad para hacer y deshacer en el ministerio. Por esa razón se encuentran ministros
atrevidos que tienen un concepto más alto del que deben tener tomándose atribuciones
que no les han sido encomendadas. Frases como “tengo un sueño de Dios, Me lanzo en fe a, Tengo el derecho de”, entre
otras tantas ideas no son más que un siervo caído en las garras del malvado
tentador.
El
tercer acontecimiento es más grave aún, con los anteriores el siervo tentado
puede creerse el engaño y hacer o decir cosas que no le son permitidas; en el
verso 8 se encuentra de nuevo una frase bastante intrigante, “Otra
vez le llevo el diablo a un monte muy alto y le mostro todos los reinos del
mundo y la gloria de ellos” este tercer acontecimiento tiene dos connotaciones
para resaltar en la tentación del siervo, una, “le llevo a un monte alto” y dos “le mostro” uno de los mayores peligros de los ministros es pretender
llegar a las alturas, a la cúspide o engañoso éxito ministerial, pero, ¿Qué es
el éxito ministerial, Carros lujosos, propiedades, libros, riquezas,
reconocimiento público, mega iglesias? En estas banalidades puede caer perdido
el siervo perdiendo el verdadero sentido del llamado ministerial. Y no quiere
decir esto que el llegar a obtener en Dios algunas de estas cosas se malo, en
absoluto, solo que el fundamento del llamado es Dios, no lo que se pueda lograr.
Una
vez en las alturas el malvado tentador, le mostró al Señor Jesús la gloria de
mundo, este es el momento más álgido de la tentación del siervo, desear la
gloria del mundo, no es más ni menos que alimentar los verdaderos deseos del
corazón, alguien dijo que el dinero no cambia a nadie, sino que resalta lo que
verdaderamente hay en el corazón, No hay nada más peligroso que un siervo impresionado
y deseoso de la gloria del mundo, por eso se
encuentra como el mundo premia a los “artistas, ,oradores, escritores”
cristianos y el pueblo cristiano les aplaude, esta parte de la tentación tiene
que ver clara y específicamente con los deseos de la carne, a lo cual con
vehemencia El Apóstol pablo dijo en Colosenses 3:5 “Por
tanto, considerad los miembros de vuestro cuerpo terrenal como muertos a la
fornicación, la impureza, las pasiones, los malos deseos y la avaricia, que es
idolatría”. A lo primero que debe morir el siervo es a darle rienda suelta a los deseos su carne y desear la gloria del “ministerio”
Hay
acontecimientos a los cuales usted se verá enfrentado en algún momento de su trasegar
ministerial, Por su puesto usted es un hijo y siervo ungido del altísimo, pero
eso no le hace el súper agente 007 con licencia para hacer lo que desee, no se
deje deslumbrar por la gloria del ministerio, ya que esto lo puedo convertir en
un ministro mundano deseoso de poder, fama, gloria.
La
victoria del siervo consiste en hacer lo que agrada al Señor de los siervos, preocúpese
por hacer su trabaja en el Señor, deje los resultados a Él y si al caso Él le
permite “tener” algo de reconocimiento sepa que toda la gloria es de ÉL y para
Él.
Josué
Daniel Aya
Pastor
CRC Kennedy
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