Según el relato en Mateo 6:5-15, Jesús, dentro de sus múltiples enseñanzas del sermón de la montaña, responde a la solicitud de algunos de discípulos de enseñarles a orar.
Deseo que usted comprenda el significado y aplicaciones del modelo de oración de Jesús.
El contexto de la oración del Padre nuestro está dentro de las enseñanzas que Jesús pronunció a sus discípulos en el sermón del monte el cual corresponde a los capítulos 5,6,7, y 8 de Mateo. Según nos relata el evangelista Mateo la multitud seguía a Jesús para ser alimentada, Él, se aparta con un grupo más selecto y les imparte las enseñanzas conocidas como el sermón del monte. De esta manera podemos concluir que la información impartida por Cristo en la montaña fue dada a los que ya hacían parte de su reino. Jesús no expresó estas enseñanzas al mundo, esto nos enseña que la temática del padre nuestro y las demás enseñanzas del sermón de la montaña, son únicamente para todos aquellos que han sido redimidos por la sangre de Cristo.
I. Preliminares de la oración. Vr 5-8 Antes de expresar la oración modelo Él Señor nos refiere una serie de enseñanzas y principios básicos que debemos tener en cuenta al momento de orar. “Y cuando ores, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público. Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos. No os hagáis, pues, semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis.”
“Y cuando ores” Este habito saludable debe ser protegido de la falsa piedad. (no actuar) Jesús siempre les recriminaba a los religiosos su forma de proceder, la palabra “hipócrita” en el original griego aludía a “actuar”, Jesús enseña que al momento de orar no se debe fingir, el momento de la oración ha de ser un acto de completa sinceridad. El Señor nos enseña las características de la oración fingida (hipócrita), uno, el orar para ser visto y dos, ser escuchado por los demás, a esto le podemos llamar una falsa piedad. (Lucas 18:9-14) El fariseo y el publicano en este pasaje nos ayudan a ampliar el panorama de la falsa piedad y su antónimo.
Oración personal y privada. Vr 6 Lo contrario a la falsa piedad es la oración sincera y dirigida a Dios Padre, esta es la oración que realizaría el publicano de Lucas 18:9-14, a diferencia de la oración falsa he hipócrita que busca la aceptación de los hombres, la oración piadosa busca la aceptación de Dios.
II. La oración Modelo. Demos entonces un visitado a lo que Jesús diría en nuestra época: "Oren así u Oren de esta manera?
a. Padre nuestro. Tradicionalmente se ha enseñado que todas los seres humanos son hijos de Dios, esta postura radica en la creencia que cómo Dios creó la raza humana eso garantiza su paternidad, esta doctrina es fácilmente desmentida por la enseñanza bíblica. Billy Graham enseña que en efecto como creaturas y creación de Dios el ser humano es hijo de Dios, no obstante, por el pecado, cada persona ha perdido la paternidad espiritual. La paternidad de Dios es un concepto mucho más amplio y profundo.
Huérfanos de Dios. La palabra de Dios enfatiza contundentemente y sin duda alguna que ciertas personas no son hijos de Dios, encontramos en las escrituras numerosas citas donde se hace hincapié a esta lamentable realidad del ser humano. Toda persona que nace, llega con la condición de orfandad espiritual, es ajeno (muerto) a la comunión con Él Padre celestial y esta condición trae algunas consecuencias. como las siguientes:
El ser humano es un hijo de ira. Por causa del pecado el ser humano se ha constituido en un enemigo de Dios. Efesios 2:3 “Entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás." Romanos 5:10-12
El ser humano es considerado un hijo de desobediencia. Efesios 5:6 “Nadie os engañe con palabras vanas, porque por estas cosas viene la ira de Dios sobre los hijos de desobediencia.”
Algunos fueron llamados hijos de Diablo. Jesús mismo acusó a algunas personas de ser hijos de Diablo. Juan 8:44 “Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. Él ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira." A todos aquellos que vivían en ciertas prácticas pecaminosas, Dios los acusó de hacer lo mismo que hace el diablo atribuyéndoles ser hijos espirituales del maligno.
Expectativa de condenación. La expectativa del ser humano es la aterradora hora del juicio y castigo del infierno. Hebreos 10:27 “Sino una horrenda expectación de juicio, y de hervor de fuego que ha de devorar a los adversarios.”
Dios desea que muchos se conviertan en sus hijos. Efesios 1:5 “En amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad” Aunque por el pecado el hombre se encuentra separado/huérfano de Dios, Él (Dios) ha provisto los medios de acercamiento para que las personas puedan adquirir el derecho legal de ser hijos de Dios. Juan 1:12 “Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios”
La adopción es un acto de parte de Dios. (Efesios 1:5)
La adopción es una declaración legal de parte de Dios, quien declara hijo suyo a quien lo acepta. (Juan 1:12)
El beneficio de ser adoptado por Dios, se recibe únicamente mediante la fe en Jesucristo. Gálatas 3:26 “pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús”
Enfoque del padre nuestro. Padre nuestro; Jesús nos está enseñando en primera instancia que la oración que hagamos debe ir dirigida hacia el Padre, notemos que Jesús no encomendó su oración a ningún intermediario sino más bien de manera directa se dirigió al Padre. Esto nos deja de manera clara y contundente que no hay otros caminos o mediadores para acercarnos al Padre, excepto Cristo.
Padre nuestro. La oración correcta comienza con la decisión correcta de acercarse a Dios por medio de la fe salvífica, volviéndose a Dios en arrepentimiento.
b. Que estas en los cielos. En segundo lugar, esto denota claramente la jerarquía que existe entre Dios y el ser humano. Él está en los cielos y nosotros somos unos simples mortales creados que moramos en la tierra.
Salomón expresó: “Pero, ¿Morará verdaderamente Dios sobre la tierra? He aquí, los cielos y los cielos de los cielos no te pueden contener, cuánto menos esta casa que yo he edificado.” 1 Reyes 8:27; 2 Crónicas 2:6; 6:18
Reverencia en la oración. Ya que Él Padre es el Alto y sublime nosotros le debemos a Él todo el respeto, la honra y la reverencia. Isaías 57:15 “Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo: Yo habito en la altura y la santidad, y con el quebrantado y humilde de espíritu, para hacer vivir el espíritu de los humildes, y para vivificar el corazón de los quebrantados.”
Los cuatro deberes de la oración.
Debemos dirigirnos a Él con temor y temblor. Esta debe ser la actitud frente a Dios cuando nos dirigimos en oración.
Debemos reconocer que Él es soberano. Salmos 135:6 “Todo lo que Jehová quiere, lo hace, En los cielos y en la tierra, en los mares y en todos los abismos.”
Debemos recordar que fuimos creados. Somos unos simples mortales, no somos ni semidioses, ni dioses pequeños (Jehová junior); somos exageradamente limitados
Debemos guardar la distancia. A Dios no le damos ordenes, no le reclamamos, no le exigimos, no declaramos, no decretamos. Santiago 4:5 “¡Vamos ahora! los que decís: Hoy y mañana iremos a tal ciudad, y estaremos allá un año, y traficaremos, y ganaremos; cuando no sabéis lo que será mañana. Porque ¿Qué es vuestra vida? Ciertamente es neblina que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece. En lugar de lo cual deberíais decir: Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello. Pero ahora os jactáis en vuestras soberbias. Toda jactancia semejante es mala; y al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado.”
c. Santificado sea tu nombre. "Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre." Mateo 9:6 LTA “Ustedes deben orar así: “Padre nuestro que estás en el cielo: Que todos reconozcan que tú eres el verdadero Dios." Frente a esta porción del Padre nuestro existen algunas posturas teológicas puesto que no es una expresión de fácil interpretación como lo son muchas de las frases expuestas por el mismo Señor Jesús.
Algunos pensamientos de eruditos:
John MacArthur Dice que “santificado sea tu nombre” se refiere al significado de la totalidad de quien es Dios, habla de su carácter, santificado, habla de sus atributos; El Padre es Santo por excelencia. https://www.youtube.com/watch?v=2xLP5DN53rQ
El termino santificado viene del griego hagiaso, de la raíz hagio, que significa santo
1. La palabra santo “hagio” no era una palabra de uso secular, sino de uso religioso y se usa en el griego bíblico. Esta expresión tiene dos usos o significados:
a. Hacer de algo ordinario algo no extraordinario. Hacer de algo común algo no común. En 1 Pedro 1:16, este es el uso que el apóstol Pedro le da a la palabra hagio. (santo) Significa tomar algo impío que no es santo y hacerlo santo al entrar en contacto con la fuente de la santidad que es Dios. Pero este significado no aplica en lo absoluto en el padre nuestro, porque nosotros no hacemos santo a Dios ni lo santificamos en la oración.
b. Tratar algo o a alguien como sagrado, es ver algo o a alguien como apartado y santo, considerar a alguien como separado, en el caso del Padre nuestro, significa, considerar al Padre como santo. Entonces santificado sea tu nombre es una petición de que Él sea reverenciado y considerado como Santo en medio de un mundo que no lo es.
R.C. Sproul Dice de la frase: “Santificado sea tu nombre”
La frase no es “santificado es tu nombre” y por esta razón esto no constituye una expresión de adoración que es lo comúnmente las personas interpreta, para que fuera una expresión de adoración debería decir santo es tu nombre y en efecto esto es lo que no dice.
Santificado sea tu nombre es la primera petición de la oración, La petición de Jesús es que el nombre del Padre sea tratado con reverencia, que sea considerado santo.
También es orar por el honor de Dios, por el avance del reino de Dios, la prioridad de la oración según Jesús es para el éxito del reino de Dios que Jesús inauguró en la tierra.
El primer motivo de oración del cristiano es que los no conversos vengan al pleno conocimiento de la persona de Dios y le den tal reverencia. https://www.youtube.com/watch?v=qW2NG4qim_M&t=1396s
d. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra. En esta frase encontramos la siguiente petición del padre nuestro.
Jesús establece en esta frase dos escenarios, primer escenario el reino, segundo escenario la tierra y una característica especial, la voluntad divina.
La palabra reino se tradujo del gr. Basileía, que traduce realeza, reinar, gobernar.
Según el diccionario: Reino es aquel territorio cuyos habitantes están sujetos a un rey. Se trata de un Estado regido por una monarquía, la forma de gobierno en la que el cargo supremo es unipersonal, vitalicio y, por lo general, hereditario.
El reino de Dios no es teocrático sino teocéntrico. No es teocrático porque no es el hombre quien lo elige como gobernante, sino que Él mismo y por si mismo es el Rey supremo. Isaías 45:5-7 “5 Yo soy Jehová, y ninguno más hay; no hay Dios fuera de mí. Yo te ceñiré, aunque tú no me conociste, 6 para que se sepa desde el nacimiento del sol, y hasta donde se pone, que no hay más que yo; yo Jehová, y ninguno más que yo, 7 que formo la luz y creo las tinieblas, que hago la paz y creo la adversidad. Yo Jehová soy el que hago todo esto.” Isaías 42:8 “Yo Jehová; este es mi nombre; y a otro no daré mi gloria, ni mi alabanza a esculturas.”
Característica del reino de Dios.
Es un reino de justicia. Mateo 6:33 “Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.”
Romanos 14:17 “porque el reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo.”
En primera instancia Jesús nos enseña a pedir que venga su reino, es decir que venga sobre la tierra (hombres) su justicia, su paz, y su gozo.
Es también probable que Jesús estuviera pidiendo por su establecimiento mesiánico en la tierra, el cual aún no está presente en medio nuestro, de manera especial vivimos en su reino espiritual, pero en un momento seremos parte de su gobierno mesiánico.
La voluntad. Jesús, nos indica que debemos pedir que su voluntad sea realizada en la tierra con la misma intensidad, firmeza, dominio y señorío que es hecha en el cielo, todas las huestes celestiales sin duda alguna hacen la voluntad de Dios, esto denota que en el cielo todos le están sujetos a Él, de la misma manera nuestra oración ha de ser que en la tierra todos le estemos sujetos a su gobernanza y hagamos su voluntad.
Característica de la voluntad de Dios. Es agradable y perfecta.
Romanos 12:2 “No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.”
En un mundo que vive independiente de Dios, que va en contra de Él, y que rechaza y repudia su voluntad Dios mismo nos pide que elevemos oración para que ese reino de justicia y paz, como lo es en el cielo se establezca en la tierra.
e. El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy. Esta sección de la oración contiene una serie de peticiones que inciden en nuestra vida cotidiana; la primera sección de peticiones del padre nuestro tiene que ver con Dios y su reino, esta segunda sección tiene que ver con nuestras necesidades. Veamos entonces las implicaciones:
i. Pan. El pan es una referencia muy importante a una de las necesidades más básicas de la subsistencia del ser humano. El pan en los tiempos de Jesús: El pan, por ejemplo, era digno de reyes y el plato principal en las mesas más afortunadas. Los pobres lo comían de cebada; los ricos, de trigo. El grano se molía entre grandes piedras, una labor que casi siempre recaía en las mujeres, aunque luego el pan pasara de largo en su mesa. https://www.lavanguardia.com/comer/20230331/8842443/comida-platos-biblia-tiempos-jesucristo-semana-santa.html#:~:text=El%20pan%2C%20por%20ejemplo%2C%20era,de%20largo%20en%20su%20mesa.
1. Jesús nos enseña a orar por aquellas necesidades básicas y fundamentales.
ii. Nuestro pan.
1. Debemos orar para que Dios desde el cielo nos de la provisión personal. En el desierto Dios mandaba el maná diario a cada familia.
2. Dios a cada uno nos dará la provisión que necesitamos, no debo estar pendiente de la provisión del vecino sino de la provisión personal. En el desierto las personas o familias que guardaban algo más del sustento diario, este maná se llenaba de gusanos.
iii. De cada día, dánoslo hoy.
1. Esto nos enseña que debemos buscar en oración la provisión justa, necesaria cada día.
2. Esto nos enseña a vivir en absoluta dependencia del Señor.
f. Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores. Esta es la segunda petición con relación a la vida humana, ahora, después de pedir por las necesidades básicas El Señor nos lleva a un terreno bastante difícil para el ser humano como lo es reconocer sus pecados y pedir perdón. Esta sección del padre nuestro contiene dos aspectos muy interesantes. 1) El perdón vertical y 2) el perdón Horizontal.
i. Perdón vertical. Este tiene que ver con mi situación personal para con Dios.
1. Perdona nuestras deudas 1: Hay dos frentes que analizar con relación al perdón:
a. El perdón para salvación. Toda persona esta llamada a acercarse a Dios para saldar cuentas con Él, este primer paso es absolutamente indispensable y se logra mediante la fe y el arrepentimiento para con el Señor Jesucristo. Una vez dado este paso, la persona recibe el privilegio de ser hijo adoptado pudiendo entonces llamar Padre al creador.
b. El perdón para restaurar la comunión. Una vez recibido el beneficio de la adopción, la persona ahora es llamada creyente o cristiano y comienza una vida diferente, en términos bíblicos se le conoce como nuevo nacimiento, y empieza a caminar en Dios, este es un proceso marcado por caídas y levantadas, no podemos negar que el creyente peca, porque efectivamente lo hace, lo que si podemos enfatizar es que el cristiano genuinamente nacido ya no vive dominado por el pecado. Pero al pecar el creyente debe sin duda alguna dirigirse al padre para pedir perdón por su pecado y restaurar la comunión la cual es rota por el acto impuro del pecado. David, expreso: “Vuélveme el gozo de la salvación”
2. Perdona nuestras deudas 2. Por supuesto acá no se está haciendo referencia a asuntos monetarios. Cada vez que pecamos, este acto es contado ante Dios como una deuda, una deuda de valor incalculable, impagable, no hay esfuerzo/valor humano que alcance a cubrir la deuda del pecado ¿Por qué? Porque la ofensa es medida por quien la recibe y no por quien la da; de esta manera al ofender a Dios con nuestros pecados se constituyen en una deuda impagable ya que debe ser pagada acorde a quien la recibe, por esta razón Dios mismo proveyó los medios para que su hijo/Dios pudiera saldar la deuda de nuestro pecado. Únicamente a través de la obra meritoria de Cristo podemos cubrir el monto total de nuestra deuda.
ii. Perdón horizontal. Este tiene que ver con las relaciones interpersonales. “Como también nosotros perdonamos a nuestros deudores”
El Señor nos insta a la importantísima necesidad de perdonar, de arreglar cuentas con nuestro prójimo, es tan serio este asunto, que, en palabras de Jesús, diría: “Júzgame con la misma vara que yo juzgo”.
1. Es imposible estar a paz y salvo con Dios y estar en odio, resentimiento con alguna persona.
2. Este pasaje también nos enseña a tener misericordia con aquella persona que nos ha ofendido, de la manera que hacemos misericordia también recibiremos misericordia.
No hay parte más importante que otra dentro del Padre Nuestro pero esta sección es quizás la que toca más profundamente nuestras fibras, el perdón es quizás el área más oculta y sellada del ser humano, es necesario al acercarnos a Dios circuncidar el prepucio de nuestro corazón, dicho castizamente: “Desnudar el corazón”
g. Y no nos metas en tentación. La mayoría de los eruditos concuerdan en que esta no es la mejor traducción ya que al revisar detenidamente la enseñanza bíblica de la doctrina algo no encajaría bien con el padre nuestro. La mejor traducción podría ser “no nos dejes caer en tentación”.
i. Dios no tienta a nadie. Santiago 1:13 “13 Cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios; porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni él tienta a nadie”
ii. ¿Qué es la tentación? Impulso de hacer o tomar algo atrayente pero que puede resultar inconveniente. / Abraham Peña: “La provocación o incitación a hacer cosas que están en contra de la santa voluntad de Dios.
iii. ¿Cuál es el propósito de la tentación? El deseo de la tentación es hacer que pequemos, y así estorbar el propósito de Dios en nuestras vidas.
iv. ¿De dónde proviene la tentación?
1. De satanás. Mateo 4:1; 2 Corintios 11:3; 1 tesalonicenses 3:4
2. Del mundo. 1 juan 2:15
3. De la carne y las concupiscencias. Santiago 1:14; 1 Corintios 10:13; Mateo 7:20-23
La enseñanza de Jesús fue pedir a Dios para seamos guardados en medio de la tentación, esta llegara sin duda alguna, pero Dios es poderoso para guardarnos sin caída. Judas 1:24-25 “Y a aquel que es poderoso para guardaros sin caída, y presentaros sin mancha delante de su gloria con gran alegría, al único y sabio Dios, nuestro Salvador, sea gloria y majestad, imperio y potencia, ahora y por todos los siglos. Amén.”
h. Mas líbranos del mal. La mejor traducción para esta frase seria “Líbranos del maligno” Este Era un título asignada a Satanás.
i. Pedir a Dios que ponga una protección a nuestro lado para ser protegidos del ataque sin piedad del maligno.
i. Porque tuyo es el reino, el poder y la gloria por todos los siglos, Amen. Si miras el Padre Nuestro que se encuentra en Mateo 6:9-13 y también Lucas 11:2-4 Pero Jesús no enseña esta frase final. El Nueva Versión Reina Valera lo incluye en Mateo, pero no formaba parte de los primeros manuscritos griegos del Nuevo Testamento. Probablemente se añadió porque históricamente esta doxología había pasado a formar parte de la liturgia católica, y venía justo después del "Padre Nuestro", conocido por la mayoría de los protestantes como el Padre Nuestro. Aunque no está incluida en los primeros manuscritos griegos de las Escrituras, los cristianos protestantes han incluid o esta línea como parte del Padre Nuestro desde el año 1600. Esta hermosa doxología nos señala la verdad de quién es Dios una vez más y alaba a Dios. Mientras meditas en esta doxología, considera lo que significa que "el reino, el poder y la gloria" sean de Dios. ¿Qué significa en tu vida que Dios tenga el poder y que Dios obtenga la gloria? https://www.faithward.org/es/como-rezar-como-jesus-la-peticion-de-oracion-del-senor-6/
Podemos concluir que la oración termina de la misma manera en que inicia, comienza reconociendo quien es Dios, y hay dos elementos indispensables en la esta oración uno es saber a quién se está dirigiendo y segundo quien es el que está hablando. Esta última frase es una recordación de:
1. El reino no nos pertenece. (Yo no soy el rey, no es mi reino y no reino)
2. El poder no nos pertenece (No es mi poder, pues no tengo poder)
3. Y la gloria no nos perteneces. (La gloria solo le pertenece al Padre)
Debemos reconocer y confesar que el Padre es Él rey soberano y supremo, que el tiene todo el poder y merece recibir por siempre toda la Gloria.
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